Don Beto ya perdió el interés por leer el periódico y por otras cosas que le gustaban, se muestra distraído como distante, tampoco ya disfruta de nuestra compañía, la enfermedad ha ido avanzando rápidamente y a la fecha no se acuerda a veces de nuestros nombres y se ha refugiado en amigos o enemigos imaginarios.
Ante esta situación hemos pasado del desconcierto, a la tristeza y luego a la fortaleza para encontrar la manera de sobrellevar sus nuevas costumbres, porque además casi no duerme, hemos tenido que acoplar nuestros horarios a su cuidado.
Esto me ha llevado a pensar egoístamente en mí, cuando se es joven, no se piensa en el futuro, estás como muy ocupada en tus cosas, estudio, trabajos, amistades, diversiones etc..
Pero aunque suene trillado el tiempo pasa, hagas lo que hagas, si formaste una familia que bien “dicen la gente” así tendrás quien te vea en tu vejez, -cosa que a veces no sucede-.
Bien pues yo aquí en mi voluntaria soledad en defensa siempre de mi independencia, pienso, los años se van llevando también la rebeldía y la intolerancia, y que queda, pues ahora simplemente la paz de un hogar solitario, pero solitario en fin, aunque no triste e improductivo porque es en esta pequeña casa donde surgen las ideas, para todo lo que hago, o pospongo.
En mis cuarentas pienso quien me acompañará en mis cincuentas y demás si es que yo vivo para esa fecha, amen de los vaticinios apocalípticos que les ha dado a todos los medios por difundir.
Mis planes han ido cambiando, ya no creo en “novelitas rosas” como dice mi amigo Jesús de León, y ahora precisamente ahora, cuando ya no poseo la firmeza de la juventud, no quise decir belleza, por no sonar presuntuosa, es ahora que pienso “quien me acompañarà”.
Paradójico, verdad, es como cuando tienes mucho trabajo y un buen sueldo, pero tu trabajo te impide disfrutar de tu remuneración, y cuando tienes tiempo suficiente para pasearte porque no estas trabajando no tienes los recursos para hacerlo.
Bueno comentario aparte ya me he puesto a trabajar en eso, es como siempre he dicho, si he de tener una compañía que bueno, si no, por algo será, hasta esta fecha lo tomo con tranquilidad sin desesperanza ni tristeza, mas adelante no se.